Cuando el mundo piensa en crisis, escasez y pobreza el reino siempre avanza con abundancia.
Debemos tener certeza que de lo poco Dios puede hacer mucho.
Arranquemos con una verdad, si caminamos con todo el mundo pensaremos, hablaremos y viviremos como todos.
Pero Dios tiene planes y propósitos para nosotros en los cuales para empezar nos saco de la multitud para darnos la oportunidad de vivir una vida diferente y plena en Él.
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12:2
Debemos pensar como Dios piensa y a lo largo de toda la biblia vemos que el principio de una victoria siempre dependía no de lo mucho que se tenia, si no de lo poco en las manos de Dios para que sea multiplicado y Él sea glorificado.
El primer paso es reconocer que Dios siempre nos da más de lo que pedimos y esperamos, eso quiere decir que debemos ser agradecidos con lo que recibimos y a partir de eso podemos creer que con eso es suficiente para empezar a dar pasos de fe y ver como se va multiplicando lo que comenzó con nada.
no podemos esperar a tener mucho para iniciar algo, de lo contrario no se necesita fe si no cantidad.
¡La fe aplica cuando lo que estas viendo en el espíritu es más de lo que tienes ahora!
Otro pensamiento que debemos cancelar en nuestra vida es creer que así estamos bien, ¿porque querer más si con lo que hay alcanza?
En la parábola de los talentos esta escondido uno de los principios más poderosos del reino y es que Dios todo lo que nos da, espera que sea multiplicado de vuelta.
Mateo 25
Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor
Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor.
Los que multiplicaron fueron recompensados pero él que tuvo miedo y no hizo nada fue castigado y se le quito lo poco que tenia.
Lo que recibimos de Dios debemos trabajarlo para cuando regrese y nos pida cuentas, el pensamiento debe ser: Pedir más para ganar más y agradar al Señor de la mies.
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